dissabte, 17 d’abril del 2010

"Anna es mortal."



“Iván Ilich vio que se moría y su desesperación era continua. En el fondo de su ser sabía que se estaba muriendo, pero no sólo no se habituaba a esa idea, sino que sencillamente no la comprendía ni podía comprenderla.

El silogismo aprendido en la Lógica de Kiezewetter: «Cayo es un ser humano, los seres humanos son mortales, por consiguiente Cayo es mortal», le había parecido legítimo únicamente con relación a Cayo, pero de ninguna manera con relación a sí mismo. Que Cayo -ser humano en abstracto- fuese mortal le parecía enteramente justo; pero él no era Cayo, ni era un hombre abstracto, sino un hombre concreto, una criatura distinta de todas las demás.

[...]

Cayo era efectivamente mortal y era justo que muriese, pero «en mi caso -se decía-, en el caso de Vanya, de Iván Ilich, con todas mis ideas y emociones, la cosa es bien distinta. Y no es posible que tenga que morirme. Eso sería demasiado horrible».”


La muerte de Iván Illich.
Leon Tolstoi.

2 comentaris:

  1. Gran petit llibre aquest, el vaig llegir ja fa temps. El que explica li passa a molta gent, segurament a tots una mica, fins i tot als que ens agrada parlr de la mort.

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  2. Sí, tens raó. És un gran llibre i una bona manera de començar amb Tolstoi; jo el vaig llegir l'any passat i em va impressionar.

    :)

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